Es una alegría grande que, en este mes de Mayo, mes de María, haya iniciativas frescas, novedosas, que nos recuerdan que rezar el Rosario no es una cosa trasnochada, sino algo que le entusiasma a Nuestra Madre la Virgen. Algo que acaba "enganchando" para bien.
Por eso, no sólo no hay que avergonzarse de rezarlo, sino que hay que fomentarlo para que otros lo "pillen".
Atrévete a saborear el Rosario. Haz que los oídos de María se deleiten con él, y se alegren contigo. Capta ese "sabor inigualable".
Te damos la pista de esos enlaces que pueden animarte a ello: