Un paréntesis para hablar de los libros. Llegado el tiempo del verano es muy bueno leer.
¿Qué libros leer ahora que, muy posiblemente, tiene uno más tiempo para hacerlo?
Hay libros que obligan a leer lento y otros que casi son de lectura apresurada.
Entre los primeros están los libros de estudio. No sólo los que sirven para aprobar una asignatura, sino aquellos que ilustran, que abren las ventanas de la inteligencia. No podemos considerarlos como enemigos. Más bien como aliados. Su lectura, aunque más trabajosa, traerá resultados que nos sorprenderán. No sería de recibo perderse la posibilidad de abrir los ojos al mundo a través de la profundidad de lo que otros han percibido.
Horizontes amplios es lo que necesitamos. Aunque cueste. Con esos maravillosos compañeros de camino aprenderemos a destilar la esencia de las cosas grandes. A saborear lo que es, en definitiva, un recreo para la inteligencia.
Entre los segundos, esos de lectura apresurada, están los libros de los que todo el mundo habla y se ofrecen casi como tributo a la modernidad. Son libros para salir al paso, para quedar bien, para pasear la vista por ellos, por si acaso encuentra uno alguna cosa aprovechable. Libros para tener, al menos, algo de qué hablar con quienes seguro que te preguntarán.
Reposan allí, encima de la mesa, para que nos los quitemos de encima cuanto antes. Es como si llevaran escrito a fuego su sino: "literatura de consumo". Están destinados, como los pañuelos de papel a servir mientras sirven: usar y tirar. Hechos, personajes que, por lo general, igual que ocupan el tiempo, después desalojan la mente sin mayor problema. Pero tampoco es que haya que desdeñarlos. Son lo que son. ¿A quién no le ha hecho pasar un buen rato un TBO?
Hay que saber qué da cada cosa. Y no despreciar lo que podemos necesitar en cada momento. Una recomendación: leer buenas cosas, casi a cámara lenta, para que ilumine nuestra mente y dé alas a nuestro espíritu, para reconocer la belleza y admirarla. A fin y al cabo también eso es un reflejo de Dios. Por eso, ahora y siempre que podamos, leer.